27.9.06

HEDNINGARNA:
"Trä"


En Suecia a comienzos de la década de los 90 se vivió un espectacular caso de renovación del folclore, remontándose genuinamente a las raíces escandinavas por medio de la recuperación y electrificación de instrumentos antiguos (algunos desaparecidos) y el acercamiento al rock con un plus de innovación rítmica. La banda encargada de esta explosión de fuerza y originalidad se llamaba Hedningarna, y enseguida se convirtió en un grupo vital para comprender el nuevo folk-rock nórdico. Este grupo recuperaba la concepción pagana (de ahí su nombre, 'los paganos') de las danzas y fiestas tradicionales campesinas, consideradas pecaminosas en tiempos muy lejanos, en los la gente danzaba alrededor de las hogueras en trance con la música de los violines, unos instrumentos que acabaron siendo perseguidos y quemados, como otros que desaparecieron en el tiempo. Anders Stake, el luthier del conjunto, construía sus propios instrumentos basados en aquellos, consiguiendo así recuperar un sonido medieval, así como viejas leyendas y tradiciones, pero en una fusión audaz y eficaz con la música actual. Algunas de sus piezas presentan una extraordinaria capacidad hipnótica, consiguiendo un sorprendentemente acercamiento a estéticas dance, una manera directa y rotunda de presentar el folclore escandinavo. Desde su primera referencia ("Hedningarna", en 1989), cada nuevo trabajo del grupo suponía un paso adelante, de hecho "Kaksi!" fue un sorprendente éxito que traspasó fronteras y consiguió en equivalente al premio grammy en Suecia al mejor álbum de folk. En "Trä", publicado por Silence Records en 1994 (comercializado en España -con la conveniente traducción de los textos y letras de las canciones- por Resistencia) hay un claro acercamiento al pop-rock, y así a un mayor rango de público.

Así como "Kaksi!" significaba 'Dos' en finlandés, "Trä" quiere decir 'Tres' en Sueco, aunque también se puede traducir como 'Madera', un título muy significativo al tratarse del material de aquellos instrumentos demoníacos, que en las manos de los miembros del grupo vuelven a cobrar vida y a electrificarse, un sonido muy particular invocado por los tres componentes suecos originales (Hållbus Totte Mattsson -laud, mandolina, lira, acordeón, salterio-, Björn Tollin -percusiones- y Anders Stake -violines, gaita sueca, flauta, arpa, guimbarda-) y las dos cantantes finlandesas incorporadas en "Kaksi!" (Sanna Kurki-Suonio y Tellu Paulasto): "Este ritmo tan particular de Hedningarna surge a partir de, por un lado, la música tradicional sueca, por otro lado, de las cantantes que somos finlandesas y adoptamos textos tradicionales que tienen mucho ritmo, y de otras influencias de India". En este tercer álbum la fusión fue totalmente fructífera y definitiva, las buenas ideas bullían en un entorno totalmente abierto y receptivo, tanto para la fuerza del rock como para la esencia de la música tradicional, si bien las melodías, al contrario que en los trabajos anteriores, pasaron a ser en su mayor parte obra de los miembros de la banda. La situación no es tan drástica en cuanto a las letras, que mantienen el espíritu del poema épico finlandés Kalevala, tratando sobre hechizos mágicos, encantamientos, sobre la tradición, la añoranza de la tierra lejana, y por supuesto sobre el amor; evidentemente no las entendemos pero la fuerza que transmite su particular interpretación -en ocasiones agresiva, o tan provocativa que a veces se podría tildar de erótica- nos hace participar de esos sentimientos. Otro pequeño cambio en "Trä" consistía en un claro descarte del repertorio instrumental, dotando a sus temas de una mayor estructura de canción moderna, tendente hacia el rock alternativo, con lo que conseguían acercarse a un público joven y variopinto. De los tres componentes suecos originales, Anders Stake fue el más fértil en la composición, legando cuatro excepcionales canciones: "Min skog" (con un comienzo intimidatorio de sierra mecánica -no en vano su título significa 'Mi bosque'- que abre un auténtico vendaval, un camino de conquista vikinga cantado por los chicos de forma abrumadora), "VargTimmen" ('La hora del lobo', sabia mezcla de momentos corales de las cantantes finlandesas con otros más rockeros con las voces de los suecos, una de las canciones importantes que contó con su correspondiente videoclip), "Gorrlaus" ('El caballo', de estupendas armonías vocales) y la espectacular "Saglaten" ('La canción de las habladurías', otra genial melodía arreglada por el grupo en su ya inconfundible estilo). Sanna Kurki-Suonio tuvo también especial protagonismo en el álbum, como coatura de la música de la mencionada "Saglaten", y en solitario la de "Täss' on nainen" (la pieza femenina -'He aquí la mujer', se traduce- que abre el disco como para empezar a entrar en trance) y el impresionante corte de cierre, "Tina vieri", un tema difícil de quitar de la cabeza por su fabuloso desarrollo, sencillamente fascinante vocal e instrumentalmente. Tellu Paulasto también colabora activamente en algunas de las creaciones, y curiosamente suya es la única pista instrumental del álbum, "SkrauTvål". Como demostración de que la esencia festiva y tradicional de sus canciones guarda una esencia tribal que introduce con mayor fuerza al oyente en su mundo antiguo, "Tuuli" ('Viento') es una pieza conjunta que presenta una sorprendende vertiente hipnótica, y en ella el vocalista, Wimme Saari, en una forma de canto tradicional Sami -en la Laponia finlandesa- llamado joik, anticipa su futura colaboración con el grupo en el sorprendente "Hippjokk". Restan los dos cortes basados en música tradicional, "Täppmarschen" y otra de las canciones importantes (si es que se pudiera destacar alguna en un conjunto de abrumadora calidad), "Räven" ("Cuervo"), una casi terrorífica y completa composición, salpicada de erotismo femenino, al final maravillosamente caótica, también adornada por un videoclip. En 1996, y como muestra del éxito obtenido, apareció en el mercado norteamericano con la distribución de Sony la recopilación "Fire", que incluía trece composiciones de los álbumes "Kaksi!" y "Trä".

La música de Hedningarna carga las pilas, es ruda pero con una clase innegable y con el importante matiz de distinción con otras bandas que le otorgan los instrumentos antiguos en combinación con los modernos. Con el paso de los discos, sus canciones estaban cada vez más trabajadas, y gracias a ciertos ritmos de naturaleza extraña y asombrosa vitalidad, lograban transmitir una energía fuera de lo común, convirtiendo de sopetón a Hedningarna (en especial tras su consagración con este espectacular e indispensable "Trä") en un referente del folk mundial, un sonido exclusivo del grupo que en vivo es rotundo y arrollador, unos directos en los que se mezclan distintos grupos y clases sociales, de folkies a heavies pasando por viejos rockeros, apasionados de las nuevas tendencias, newageros o cualquier curioso atraído por experiencias fuertes. Y ciertamente es una experiencia que no hay que dejar pasar.









7 comentarios:

Anónimo dijo...

Veo que ya funciona tu blog.
Impresionante concierto ayer de Mark Knopfler con Mortadelo, Bill Clinton y compañia. Hay que repetirlo.

Pepe dijo...

He conseguido restablecerlo, pero estuvo inactivo todo el jueves 28. Para los que no entiendan tu jerga, el concierto de ayer fue de Wim Mertens (estoy maquinando ya la crítica de "Jardin Clos") y sí, fue estupendo.
Saludos, veo que también tú has solucionado tus problemas de conexión.

Anónimo dijo...

"Tra" es para mí uno de los discos más grandes e innovadores de los últimos años, una maravilla inigualable en estilo y calidad. De hecho, es el mejor del grupo. Por cierto, ya va siendo hora de que saquen otro disco, que están tardando.

Anónimo dijo...

Impresionante, Fuerza, fuerza...musical, (a veces con un sonido rudo, -es un grupo para directo-) y también en las letras que son contundentes en el amor (la fuerza de la mujer), la lucha, la consecución de lo que se quiere,...particularmente creo, que se superaron después, pero es un gran disco, fundamental en su evolución -su "Tra" (Tres, de 3º diso) poco tiene que ver con el primero-, y en la música nórdica. Pasaron de los pequeños auditorios a los grandes fetivales musicales.

Anónimo dijo...

Soy el usuario anónimo

Anónimo dijo...

Por cierto maño, que tal están las ediciones especiales de Heroes del Silencio, (especialmente la de El mar no cesa)?. Esto es sin que sirva de precedente, aprovecho ya que Hedningarna y Heroes son grupos cañeros.

Pepe dijo...

Pues sí, ya es hora de que saquen algo nuevo, aunque será difícil que esté a la altura de "Trä".
Como buen maño fui seguidor de Héroes del Silencio, y "El mar no cesa" es mi favorito en su discografía ("Senderos de traición" está cerca), pero no he podido escuchar ni averiguar nada de la edición especial. Ya indagaré.