22.2.09

CHRISTIAN BUEHNER
& HELGE SCHROEDER:
"Nightflight"


Aunque su nombre no sea tan conocido como los de Paul Horn, Paul Winter, Deuter, Ray Lynch o Steven Halpern, Suzanne Doucet fue otra de las pioneras de la música new age, antes incluso de que apareciera esta denominación. Nacida en Alemania y conocida allí por una comercial etapa pop, acabó dejando esa vida y comenzando una completamente distinta en los Estados Unidos, donde se involucró totalmente en la música New Age no sólo con sus composiciones sino creando festivales, distribuidoras, asociaciones, programas de radio y su propia compañía discográfica, de nombre Beyond, distribuída en exclusiva desde Los Angeles por su distribuidora Only New Age Music.
Fue Beyond la que publicó en 1987 el álbum "Nightflight" de dos músicos alemanes semidesconocidos (antes y ahora) de nombres Christian Buehner y Helge Schroeder. Es de Buehner del que se pueden encontrar ciertos detalles biográficos, como su precoz faceta de compositor de música para televisión, así como una breve incursión en el mundo de la actuación, todo esto en su alemania natal; afincado en Estados Unidos, continúa su labor musical en un estilo básicamente meditativo y de bandas sonoras. Su amistad con Suzanne Doucet -ya trabajaron juntos en Alemania- le llevó a publicar junto a Helge Schroeder dos trabajos en Beyond, del que destaca este primero, "Nightflight", donde nos encontramos una música acorde con el mundo de ensoñación y fantasía de las portadas de los discos del sello (todos ellos collages de Ken Knutson creados en 1984 bajo la dirección de James Wanless, para las cartas del Tarot Voyager), en un estilo muy místico, relajante, claramente new age, pero también aventurero y rítmico. El tema más destacado del trabajo es el primero, titulado "Sun dance", una animada y a la vez tranquila composición cíclica de más de trece minutos de duración, de suave sonido aflautado dominado por los teclados (en el folleto del disco se define como 'una sinfonía de luz y sonido en el cielo infinito'). De parecido tratamiento es la mitad del disco ("Icarus", "Deja vu"), para reflejar en el resto de los cortes unas intenciones más meditativas ("Om" -definida como 'canción de amor de nuestro planeta llamando a otro planeta', con sugerentes voces y arrullos de agua sobre mantos de teclados-, "Nightflight, "Light moon").
"Nightflight" no pasará a la historia como una de las cumbres de la nuevas músicas, pero posiblemente sí como una agradable muestra de música New Age hecha con entusiasmo y escuchada con jovialidad, grabada en Münich con un arsenal de teclados, guitarra y percusiones, y digitalizada en los Estados Unidos. La estrella es el símbolo del Tarot Voyager elegido para la portada de este trabajo, y no podía ser mejor elección, ya que está relacionada con el signo de Acuario. Es Acuario esa Nueva Era Astrológica a la que, tras dos mil años de Era de Piscis, se nos dice que se llegó a finales del siglo XX, e inauguró una nueva conciencia hacia la cual está direccionada la música de la Nueva Era o música New Age.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Solo por Sun Dance ya merecería la pena el álbum

Pepe dijo...

Evidentemente fue esa composición la que originó mi interés por el álbum, cuando la escuché en el "Música para desaparecer dentro". El resto del disco va por esa línea, aunque no llega a su nivel.