20.12.20

BILL WHELAN:
"The Seville Suite: Kinsale to La Coruña"

A pesar de tener pocos trabajos a sus espaldas, Bill Whelan es uno de los compositores más exitosos de la música tradicional irlandesa. "Riverdance" fue la obra con la que alcanzó la cumbre, afamada y triunfante representación en el intermedio del Festival de la Canción de Eurovisión de 1994, que ampliada como espectáculo de danza ha sido vista por más de 25 millones de personas en todo el mundo, y plasmada en disco logró unas ventas espectaculares, siendo su sencillo un espectacular número 1 de Irlanda durante 18 semanas (es la canción que ocupa el primer lugar histórico, por delante de éxitos de The Beatles, The Black Eyed Peas, Pharrell Williams, Sinead O Connor o Queen). Sin embargo, su primer disco publicado fue "The Seville Suite", una obra denominada así por estar compuesta para ser estrenada en España en el marco de la Exposición Universal de Sevilla en 1992. Encargado por el ministerio de Taoiseach (el jefe de Gobierno de la República de Irlanda), el subtítulo de este proyecto era "Kinsale to La Coruña", y escondía un viaje musical que relataba las andanzas de Hugh O'Donnell. Apodado 'el rojo' por el color de su pelo, O'Donnell encabezó la rebelión irlandesa contra el gobierno inglés de Isabel I, que acabaría provocando la Guerra de los Nueve Años. Derrotado en la batalla de Kinsale en enero de 1602, Hugh viajó hasta España buscando el apoyo de Felipe III para una invasión irlandesa, siendo recibido con honores en La Coruña, donde fundó un colegio irlandés. Antes de poder ser recibido por el Rey, falleció en el castillo vallisoletano de Simancas ese mismo año, aunque para otorgar un toque a la par misterioso y legendario a la historia, la ubicación exacta de su tumba es desconocida. Whelan, que acababa de arreglar y producir de manera exquisita el trabajo de Andy Irvine y Davy Spillane "Eastwind", logró que la música trascendiera su realidad auditiva para llegar a ser la crónica de una historia en la que, además, tenía mucho que ver el Imperio español.

Para los que no conocieran a su autor, el posterior trabajo recopilatorio "The Roots of Riverdance" daba numerosas pistas sobre quién era Bill whelan y cómo iba a lograr ese estatus de compositor de nombre y de culto en la década de los 90. Educado musicalmente en Dublín (donde llegó a trabajar como pianista de sesión y teclista en espectáculos teatrales), la contribución de Whelan a la música orquestal había comenzado en 1987, con una suite que conmemoraba la música de cine de Seán Ó Riada, interpretada por la Orquesta Sinfónica Nacional de Irlanda bajo la dirección de Elmer Bernstein. Cinco años después, en 1992, Tara Records editó "The Seville Suite", y Celtic Heartbeat lo reeditó en 1997 con cambio radical de portada. Poderosa y deslumbrante, esta sinfonía irlandesa de bello cuerpo celta y lograda carga dramática, posee además aportes españoles, una influencia que se repetirá en "Riverdance". Los solistas de la suite son una banda hispanoirlandesa de auténtico lujo: Davy Spillane (gaita irlandesa), Máirtín O'Connor (acordeón), Mel Mercier (pandero), Mairead Nesbitt (violín), Rodrigo Romaní (arpa), Xosé V. Ferreirós y Nando Casal (flautas irlandesas y gaitas gallegas) y la Orquesta de Conciertos de la Radiotelevisión de Irlanda, conducida por Alan Smale. Algo distintos son los nombres en "Timedance" y "Dún Briste", como se comentará después. "Kinsale" es una apertura orquestal de tintes heroicos, aportados especialmente por los metales, recreando la batalla de esa ciudad del sur de Irlanda, "una evocación orquestal de los acontecimientos que tuvieron lugar en Kinsale durante la mañana del día de Nochebuena de 1601. Las tropas irlandesas rodean a las británicas, que poco antes habían puesto sitio a la ciudad pretendiendo desalojar de allí de Don Juan de Águila y su guarnición española. En apariencia, la coalición hispanoirlandesa se encuentra en una posición de fuerza, teniendo al ejército de Mountjoy entre dos fuegos. Sin embargo, el mal tiempo imposibilita el avance irlandés y una traición les impide contar con la ventaja de la sorpresa, lo que ocasiona que la batalla sea breve y decisiva, quedando las fuerzas irlandesas divididas y con grandes pérdidas humanas". La gaita irlandesa domina el espacio a continuación (espléndido, como siempre, está Davy Spillane) en el triste "O'Donnell's Lament", un aire lento al que se añade posteriormente la orquesta en una altiva melodía que supone un momento importante de la obra. La emoción continúa con un tema combativo dedicado al militar español "Pedro De Zubiaur", presa además del lirismo de las flautas, en el que O'Donnell decide partir de inmediato a España para convencer al Rey de que le siga apoyando con los refuerzos que sean necesarios. El acordeón de Máirtín O'Connor surge de golpe en la jiga "Fr. Conry's jig" para desplegar su magia de apariencia tradicional en esta pieza que recrea la necesidad de no perder el buen humor, en la persona del franciscano Fray Florence Conry. El viaje continúa, y en contraste con los momentos de entretenimiento, aparece la tormenta en otro corte incidental de rigor orquestal titulado "The Storm", de una especial atracción y sentido de la aventura. Por fin, el barco llega a las costas de Asturias, aunque Hugh el Rojo -detalla Whelan en sus notas- parece encontrarse muy enfermo. Una vez la historia transcurre en España aparece la influencia musical gallega de manos de varios miembros del grupo Milladoiro ("quedando de manifiesto las amplias conexiones estilísticas existentes entre la música tradicional gallega y la irlandesa", apuntilla el autor), pues el viaje continúa por tierra hacia Galicia en "The Coast of Galicia". El arpa de Rodrigo Romaní rompe la tensión sinfónica con una calma y un sonido melifluo, y las flautas (Xosé V. Ferreirós y Nando Casal) equilibran la ambientalidad y melodiosidad celta. "The Road to La Coruña" es un gran tema animado y bailable que supone la alegría de la culminación del viaje. O'Donnell llega a La Coruña y es hospedado en la casa del gobernador y capitán general del Reino de Galicia, Luis Carrillo de Toledo, conde de Caracena. De hecho, "Caraçena" es el título de la completa composición con la que se cierra la suite, que aúna las dos vertientes mostradas en el desarrollo de la obra, la sinfónica y la danza celta. Una versión recortada, la más animada y final de la obra ("la unión de los músicos irlandeses y españoles en un brindis por el éxito final de sus campañas conjuntas"), es la que circula en recopilatorios como "The Celtic Heartbeat Collection" o "Celtic Tradition". En el espectáculo en directo, el bailarín irlandés Michael Murphy compartía escenario con la bailaora de flamenco sevillana María Pagés, que volvería a colaborar con Bill Whelan en "Riverdance: The Show", actuando en este espectáculo durante los años 1995 y 1996 en los teatros más importantes del mundo. Como añadidos a la partitura orquestal que ocupa el título del disco, se grabaron dos piezas importantes de las que es necesario dar detalles. Mientras se interesaba en la música tradicional irlandesa, Whelan se asoció en ocasiones con Shaun Davey para proyectos conjuntos en la década de los 70, y posteriormente se unió a la banda Planxty, con la que tocó en dos álbumes. En 1981, coescribió una pieza titulada "Timedance" junto a Dónal Lunny, y Planxty la interpretó en el Festival de Eurovisión de ese año. "Timedance '92" es la regrabación del ese tema, no tan adictivo y contundente como "Riverdance", pero de gran intensidad y herencia celta, que mantuvo practicamente intacta la pieza (de sus tres partes, "The Humours of Barrack Street / Isercleran / The Ballymun Regatta", sólo la última precisó un nuevo arreglo) y reunió a gran parte del importante elenco original: Bill Whelan (piano, teclados), Dónal Lunny (bouzouki, guitarra, bodhrán), Andy Irvine (bouzouki, mandolina), Nollaig Casey (violín), las cuerdas de The Timedance String Ensemble conducida por Audrey Collins, y la genialidad de Liam O'Flynn a la uilleann pipe o gaita irlandesa, sobre el que Bill reconocía en el libreto de este disco: "Cada vez que escucho esto, no puedo evitar regocijarme con el prístino tono de Liam". Como último añadido, y manteniendo las aportaciones de la Timedance String Ensemble, el whistle de Dónal Lunny y los teclados del propio Whelan, "Dún Briste" es un final con cierto misterio que evoca la enorme columna de roca que se encuentra al norte del condado irlandés de Mayo, una espectacular formación de 50 metros de altura separada 80 metros de una costa furiosa (cuenta la leyenda que fue apartada por el mismo San Patricio), de la que se dice que menos de 10 personas han podido acceder a ella en los últimos 700 años. 

La desafortunada historia de Hugh O'Donnell ha sido llevada a la pantalla grande en alguna ocasión ('The Fighting Prince of Donegal' -'El valiente príncipe de Donegal'- en 1966), pero este William Wallace irlandés nunca ha alcanzado la fama de esa otra figura histórica escocesa que encarnó con enorme éxito Mel Gibson. Unos años antes de adquirir una cierta experiencia en el cine (especialmente con 'Dancing at Lughnasa' -'El baile de agosto'- y 'Some Mother's Son' -'En el nombre del hijo'-, ambas editadas en CD), Bill Whelan honró su figura con una extraordinaria obra orquestal estrenada en Sevilla el 4 de octubre de 1992, Día Nacional de Irlanda en la Expo'92. Este arreglista y productor (Planxty, U2, Kate Bush, Andy Irvine, Patrick Street) que dedicaba esa suite a la memoria de su padre, dada la enorme fama que adquirió tras "Riverdance" vio reeditada "The Seville Suite" -con enorme fortuna para el mundo de la música, pues no merecía ser olvidada- en el sello dependiente de Atlantic Records, Celtic Heartbeat, autodefinido como "un sello irlandés que le invita a un viaje en el que experimentará la riqueza de la tradición celta y será testigo del amanecer de una nueva era excitante para la música celta". Aunque sea un compositor que no se prodigue mucho, es necesario estar atentos a cualquiera de los movimientos de Bill Whelan, como la publicación en 2007, de nuevo por mediación de Tara Records, de su trabajo con la Irish Camber Orchestra "The Connemara Suite".

ANTERIORES CRÍTICAS RELACIONADAS:











No hay comentarios:

Publicar un comentario